acto sexual y ritmo

Una de las cosas fundamentales cuando se hace el amor es el ritmo, es decir la velocidad con la que se realiza el acto sexual: a veces lento y cadencioso, a veces rápido y violento.

El ritmo sexual depende de nuestro estilo y estado físico. Y digo que el ritmo es fundamental en el sexo porque del ritmo y de que tan constante sea depende que tan efectivos seamos los hombres en llevar a nuestra
pareja al orgasmo.
Está demostrado que es muy importante mantener un ritmo constante

para que la mujer pueda llegar más facilmente al orgasmo. Y hablo de un ritmo constante no solo en la
penetración, sino también en actividades como el  sexo oral y las caricias.
No sirve que arremetamos desde el principio como ametralladoras, si luego el ritmo va decaer al minuto de haber empezado.

Y no hablo de hacer que la relación sea monótoma, para nada.
Podemos variar la forma de penetración, mover el pene en forma circular, de arriba a abajo, de lado, seguir jugando con las poses, con caricias, podemos seguir explorando con nuestra lengua y manos, pero siempre manteniendo un ritmo constante.

Van a ver como la excitación de la mujer va subiendo poco a poco, hasta que estalle en un orgasmo.