martes, 19 de mayo de 2015

Tú signo zodiacal y zonas erógenas de cada signo


Cada signo es diferente y tiene sus propios gustos en todos los aspectos, desde la forma de divertirse hasta en el sexo. Nosotros queremos ayudarte a que conozcas mejor los de tu amante, así que te ofrecemos una guía de las zonas erógenas preferidas por cada signo ¡acertarás seguro!
Un géminis probablemente tenga gustos completamente diferentes a un escorpio, por lo mismo que un aries puede que no se parezca en nada a un piscis. Cada signo tiene sus propias características y esto afecta a todos los aspectos, incluido el sexo, por supuesto.
Las zonas erógenas cambian según cada signo y por eso debes de saber cuál es el de tu pareja o amante para no equivocarte.
A continuación te detallamos las zonas erógenas preferidas de cada signo ¡no pierdas detalle!

ARIES: suelen ser calientes, expansivos, eróticos sin entrar en suavidades ni sutilezas. Les encanta que les digan cosas subidas de tono a la hora de hacer el amor y durante la conquista. Necesitan mucho toqueteo y besos durante el coqueteo para encender los motores de su mente.
Sus zonas más eróticas son los pechos, los genitales y sus alrededores, tanto en hombres como en mujeres. Pero el vientre es la zona que más le excita. Si su amante acaricia con la mano, los labios, la lengua o cualquier elemento esa parte de su cuerpo perderá la cabeza de placer.
TAURO: uno de los signos más románticos, le encanta que le besen el cuello y se lo acaricien con la lengua con suavidad. Si alguien lo hace, posiblemente se entregue completamente. Necesitan sentirse amados o muy deseados para que la pasión se despierte. El sexo oral, aunque le da un poco de pudor, le es necesario para lograr un orgasmo pleno y placentero.
Para ellos, lo mejor son las caricias alrededor de los genitales y en la barriga. Un coito largo con penetraciones profundas y lentas, les hace a ambos ver las estrellas y llegar al cielo.
GÉMINIS: son muy sensuales como todo signo de aire. Caprichosos y fantasiosos, están siempre a la espera de nuevas experiencias. Su zona erógena más potente es su cerebro, así que prueba con disfraces o algo que le sorprenda.
Fantasean mucho cuando les acarician las piernas y los brazos. Se excitan mucho con las sutilezas. Tanto para ellas como para ellos, cualquier roce en cualquier parte de sus cuerpos los pone en buena sintonía.
Cuando logras encender su excitación el amor salvaje es lo suyo, mordiscos y tirones de pelo, el placer en los senos es supremo, así como las caricias en el miembro viril. La música y la luz tenue es perfecta para relajar el cuerpo y entregarse a la pasión. El frotar de los cuerpos es su delicia y es multiorgásmico de corazón.
CÁNCER: también de naturaleza romántica a la par que pasional, la música sugestiva abre las puertas para la pasión. Le gusta ver cuando hace el amor, ya sea en el espejo o haciendo fotos con una cámara fotográfica. Mantiene los ojos abiertos para excitarse con el placer del otro.
Ella para llegar al clímax necesita mucho trabajo y dedicación. Sus zonas erógenas están en todo el cuerpo, cualquier caricia, y si viene acompañada de ternura las puede poner calientes. Él prefiere una lengua traviesa en la barriga y más abajo también.
 Les encanta los besos y las caricias en la parte interna de los muslos, los besos prolongados y la penetración suave al ritmo de la música caliente.
LEO: se calientan con las caricias muy lentas en las manos y los antebrazos. Las nalgas son su zona más erógena. Le encanta dejarse llevar por la pasión y desatar su lado más salvaje, que se suele activar cuando alguien le toca esa zona.
Una vez encendida la pasión van por el placer sin tanto preámbulo, arrancar la ropa y entrar en su cuerpo apretándolo contra tu cuerpo. Ellos mueren por los besos en la nuca, y ellas por los mordiscos en los pezones. Les gusta la penetración fuerte y repetida mil veces mil. No se conforman con un orgasmo, descansan un poco, vuelven a jugar y montar el cuerpo candente del amado.
VIRGO: como a todo signo de aire hay que tenerle paciencia. Las películas eróticas y los cuerpos desnudos, los escotes y faldas cortas le vuelven loco hasta el punto de máxima calentura. Provocan a tu pareja y luego se haces los difíciles para excitarle aún más con sus súplicas y urgencia sexual. Le gusta ser salvajes e imaginarse que están en un lugar prohibido.
El pecho suele ser la zona más sensible a la hora de despertar el deseo de un virgo. También adoran las caricias en la espalda y en los glúteos. Caricias suaves y constantes son la clave.
LIBRA: les encanta los preliminares y recrear los sentidos con velas, olores, charla y buen vino durante el coqueteo y juego erótico. Irse quitando la ropa en tono desafiante y pícaro, sexo oral en el salón y en la cocina hasta que le vea arder.
Los lóbulos de las orejas son su punto débil. Si le susurras a un libra al oído dejando que de vez en cuando tus labios rocen su lóbulo de la oreja le volverás loco.
Las Libra necesitan" amor" y "devoción" de parte de sus amantes. Si estas cualidades vienen acompañadas de delicados mordiscos en el cuello y suaves besos en los hombros, la felicidad será completa. Ellos mueren por eróticos besos en los muslos.
Logran el orgasmo fácilmente y les gusta repetir varias veces el acto en una sola noche.
ESCORPIO: A veces amanece caliente desde que se levantas, llama a su pareja por teléfono o manda mensajitos atrevidos advirtiéndole que cuando llegue a casa, le encontrará casi sin ropa y ardiendo al rojo vivo.
El cuerpo de un Escorpio sea hombre o mujer es un delicado y muy sensible violín. Es signo más directo del zodiaco, no hacen falta muchos preámbulos para levantar su pasión. Directos al grano. Las caricias en los pechos y en los genitales son esenciales para ponerlos a tono. Unas suaves chupaditas en los dedos de las manos y pies, pueden dejarlos totalmente enloquecidos.
SAGITARIO: Es tan cómodo que le gusta empezar el toqueteo ya en la cama, en la posición acostado y que el otro le haga casi todo el trabajito. Su cuerpo cálido y amoroso incita a que le adoren, le gustan las caricias suaves y las velas, verl@ desnud@ temblando de placer.
Son calientes por donde se les busque, pasionales sin medida y eternos buscadores de placer. Los pechos y el cuello, en las mujeres. Los hombres se mueren de pasión con una dulce caricia en los glúteos.
CAPRICORNIO: Les cuesta aflojar el cuerpo y olvidar los problemas y entregarse al placer. Son muy visuales y les importa mucho que su amante tenga buen culo y piernas, cuando menos. Se ponen en poses provocativas para que se excite su pareja y luego duran horas y horas de placer sin freno.
Si logras convencerlos de que es más importante gozar del sexo que ocuparse del trabajo, sus zonas erógenas se concentran en la barriga y los genitales. Estos nativos necesitan caricias concretas, nada de sutilezas, para disfrutar del sexo. Sus partes erógenas son el centro de su placer. Un secreto: los pies. El placer secreto de los capricornio es que les hagan un buen masaje erótico ¡en los pies!
ACUARIO: como todo signo de aire mueren por las sutilezas y necesitan ser tratados como instrumentos musicales. Para ellos la seducción abarca la buena comida, las velas y la bebida, muchos besos y toqueteos sabrosos con una actitud de “Gáname esclavo”, que enciende a su pareja. Son muy escandalosa en el éxtasis y orgasmo, les gusta cambiar de posiciones y salirse de la cama a otros rincones de la casa.
 Su zona clave es la espalda. Besos, caricias o un masaje con un aceite aromático harán que acuario entre directamente en el séptimo cielo. Su libido se estremece de placer cuando les recorren el cuerpo con manos expertas. Tienen que sentirse cómodos a la hora de gozar, cualquier forma de presión los enfría definitivamente.
PISCIS: no esperan a que el otro quiera hacer el amor, simplemente lo empiezan a tocar y quiera o no se montas en él como potro salvaje. Les gusta saber sus puntos más sensibles para derretirl@, goza con su placer y con el hecho de sentirse buen amante. Es insaciable y loco en la cama.
Su punto débil son las piernas, le vuelven loco. Bésaselas desde los tobillos a las ingles y se estremecerá de placer. Otros puntos son la espalda, los glúteos y la parte detrás de las rodillas. Son muy sensibles a las caricias en el pelo y a cualquier detalle de ternura durante el acto sexual.